Miguel Ángel Buonarroti (1475-1564) es considerado uno de los mayores artistas de la historia, por sus obras maestras en escultura, pintura, arquitectura y poesía. Sin embargo, pocos saben que en sus inicios también se dedicó a la falsificación de arte, con el fin de demostrar su talento, ganar dinero o burlarse de los expertos. Miguel Ángel Buonarroti "Eros durmiente" y dibujos ahumados Según los biógrafos de Miguel Ángel Buonarroti, este realizó algunas obras que hizo pasar por antiguas como la escultura de "Eros durmiente" que vendió al cardenal Raffaele Riario. Sin embargo, el engaño no duró mucho. El cardenal pronto se enteró de que la estatua era una falsificación moderna, y quiso devolverla al vendedor. Pero para entonces, Miguel Ángel ya se había hecho famoso por su “Piedad”, que se exhibía en la Basílica de San Pedro. No obstante, el cardenal, lejos de enfadarse se convirtió en el primer patrocinador de Miguel Ángel y le encargó otras dos obras: un &quo
Los jardines colgantes de Babilonia fueron una obra arquitectónica y botánica que se considera una de las siete maravillas del mundo antiguo. Se trataba de una serie de terrazas escalonadas que estaban cubiertas de plantas y árboles exóticos, y que se elevaban sobre la ciudad de Babilonia, en el actual Irak. Los jardines colgantes de Babilonia eran una muestra del poder y la belleza del imperio babilónico, y una fuente de admiración y asombro para los visitantes. Qué eran y cómo se construyeron los jardines colgantes de Babilonia? Los jardines colgantes de Babilonia eran una construcción artificial que recreaba un paisaje natural en medio de la ciudad. Según las descripciones antiguas, los jardines consistían en una estructura de ladrillo y piedra que tenía varias plataformas o niveles, que se sostenían sobre columnas o pilares. Cada plataforma tenía un sistema de riego que llevaba agua desde el río Éufrates hasta las plantas y los árboles que crecían en ella. El conjunto formaba un