Los huevos de Fabergé son unos objetos decorativos en forma de huevo, elaborados con metales y piedras preciosas, que fueron creados por el joyero Peter Carl Fabergé y sus artesanos para los zares de Rusia y otros clientes distinguidos entre 1885 y 1917. Estos huevos se consideran obras maestras de la orfebrería, por su belleza, su complejidad y su originalidad. Además, son testimonios de una época histórica marcada por el esplendor y el ocaso de la dinastía Romanov, la última familia imperial rusa. El origen de los huevos de Fabergé La tradición de regalar huevos decorados en Pascua es muy antigua y tiene un significado simbólico de vida, renacimiento y esperanza. En la Iglesia ortodoxa rusa, la Pascua es la fiesta más importante del año y se celebra con tres besos y el intercambio de huevos pintados o esmaltados. La idea de crear huevos de Pascua con materiales preciosos se le ocurrió al zar Alejandro III, quien en 1885 encargó al joyero Peter Carl Fabergé un huevo especial para su
Los buques RSM Olympic, Titanic y Britannic pertenecían a la compañía naviera británica White Star Line, eran muy semejantes y estaban considerados como los mejores barcos de la época, pero todos tuvieron algún tipo de accidente. Una joven camarera irlandesa estaba en 1911 en el Olympic cuando éste colisionó contra el Hawke, un año después se salvó del naufragio del Titanic y cuatro más tarde también del hundimiento del Britannic. Violet Jessop White Star Line La compañía naviera británica Oceanic Steam Navigation Company, conocida como White Star Line, dedicada al transporte de pasajeros y carga durante los siglos XIX y XX, fue fundada en Liverpool (Inglaterra) en 1845 por John Pikington y Henry Threlfall Wilson con la idea de atender al floreciente comercio de oro entre Gran Bretaña y Australia. Para las compañías navieras era común (y lo sigue siendo) el tener un tema común para el nombre de los barcos. En el caso de la White Star Line fue utilizar el sufijo ic . Además,