Cuando los romanos llegaron a la Península Ibérica, esta ya estaba habitada por una variedad de pueblos que a menudo se denominan genéricamente como los "pueblos prerromanos" que no estaban políticamente unificados, y se caracterizaban por tener diferentes lenguas, culturas y formas de organización social. Tras la romanización de Hispania otros tantos pueblos se asentaron en la Península Ibérica contribuyendo a su riqueza cultural. Sin embargo las diversas luchas de algunos de estos por el poder y el territorio concluyeron con la unificación tras la llamada Reconquista de los Reyes Católicos. Pueblos prerromanos Antes de la llegada de los roamnos a la Península Ibérica, en el siglo III a.C., esta ya estaba habitada por una serie de pueblos que formaban parte de la cultura megalítica, que aquí se desarrolló entre el 4.000 a.C. y el 2.000 a.C., y se caracterizó por la construcción de monumentos funerarios con grandes piedras, como los dólmenes, los menhires y los crómlech. Est
Se sabe que Juan de Pareja aprendió a pintar en el taller de Diego Velázquez, aunque no se descarta que hubiera adquirido rudimentos de esa habilidad anteriormente. Su capacidad para crear obras con gran impacto visual lo convierten con el tiempo en una figura importante en la historia del arte español de su época. Juan de Pareja Semblanza Aunque en general se sabe poco sobre la vida y las obras de Juan de Pareja, sí se conoce, por documentos hallados en las últimas décadas, que fue un esclavo morisco nacido alrededor de 1606 o 1610 en Antequera (Málaga), y que fue comprado por el artista español Diego Velázquez en algún momento de la década de 1620 para trabajar como su ayudante y esclavo en su taller. Aunque Pareja fue esclavo, parece ser que Velázquez lo trató con respeto y le permitió estudiar pintura. Debido a esto, Pareja pudo convertirse años después en un hábil pintor por cuenta propia. En un principio, en el estudio de Velázquez, Pareja aprendió a mezclar colores y preparar li