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CRAC DEL 29: LA CRISIS QUE INVENTARON LOS BANQUEROS

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El  24 de octubre de 1929 , pocas horas después de que la bolsa de Nueva York abriera sus puertas, un corredor de bolsa se desplomaba sobre su puesto de trabajo. No había sido un infarto, sino un colapso nervioso. Era la primera víctima de un pánico que se extendería como un reguero de pólvora por el corazón financiero del mundo . Ese día, bautizado para siempre como el  "Jueves Negro" , marcó el inicio formal del  Crac del 29 , pero fue solo el comienzo de una catástrofe que culminaría cinco días después con el  "Martes Negro" , el 29 de octubre, cuando se negociaron 16,4 millones de acciones en un solo día de caos absoluto . La narrativa oficial pronto catalogó el evento como una corrección de mercado inevitable tras una década de especulación desenfrenada, un "pinchazo" de una burbuja financiera que había crecido de forma insostenible durante los "Felices Años Veinte" . Sin embargo, esta explicación, aunque cómoda, esconde una realidad mucho m...

ISABEL "LA CATOLICA": MUJER, REINA Y MADRE

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Tuvo cinco hijos a los que no veía con demasiada asiduidad, pero se encargó de que su educación fuera esmerada. La muerte de su heredero, Juan, fue un duro golpe que no superó, al igual que la de su hija Isabel y su nieto Miguel que rompían su sueño dinástico. Como mujer, Isabel también sufrió de celos al lado de su esposo Fernando el cual, como cualquier príncipe de la época, disfrutaba de correrías e infidelidades con total inmunidad. Isabel la Católica Retrato de una reina Cuentan los cronistas de Isabel la Católica que era alta, de piel muy blanca y de porte majestuoso. Que tenía los ojos claros, de un azul verdoso, y que su mirar era muy gracioso y honesto. Su pelo era rubio, entre rojizo-dorado y cobrizo (rasgo que heredaron sus hijas Juana y Catalina), aunque con los años se le fue oscureciendo hasta volverse casi negro. Los escritores de entonces no se cansan de ponderar su hermosura, que según ellos no tenía rival en su tiempo, su honestidad, su ponderaci...