Miguel Ángel Buonarroti (1475-1564) es considerado uno de los mayores artistas de la historia, por sus obras maestras en escultura, pintura, arquitectura y poesía. Sin embargo, pocos saben que en sus inicios también se dedicó a la falsificación de arte, con el fin de demostrar su talento, ganar dinero o burlarse de los expertos. Miguel Ángel Buonarroti "Eros durmiente" y dibujos ahumados Según los biógrafos de Miguel Ángel Buonarroti, este realizó algunas obras que hizo pasar por antiguas como la escultura de "Eros durmiente" que vendió al cardenal Raffaele Riario. Sin embargo, el engaño no duró mucho. El cardenal pronto se enteró de que la estatua era una falsificación moderna, y quiso devolverla al vendedor. Pero para entonces, Miguel Ángel ya se había hecho famoso por su “Piedad”, que se exhibía en la Basílica de San Pedro. No obstante, el cardenal, lejos de enfadarse se convirtió en el primer patrocinador de Miguel Ángel y le encargó otras dos obras: un &quo
Federico de Madrazo es, por definición, el retratista del romanticismo del siglo XIX español. No solo fue el pintor de cámara de la reina Isabel II, sino el imprescindible pintor de la aristocracia, la burguesía y los personajes de la cultura de su tiempo. Autorretrato de Federico de Madrazo De cuna y oficio A Madrazo (1815-1894) su afición por la pintura no le vino por casualidad. Era hijo de pintor (su padre José lo era), nieto (su abuelo era el pintor polaco Tadeusz Kuntz), hermano (varios de sus hermanos fueron pintores), padre (su hijo fue el pintor Raimando Madrazo) y abuelo (su nieto fue Mariano Fortuny y Madrazo). A los dieciséis años apuntaba maneras, de tal forma que a los diecinueve ingresaría en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando donde fue becado para estudiar en París, trasladándose posteriormente a Roma, ciudades donde recibiría la influencia de los grandes movimientos artísticos del momentos y donde aprendió las técnicas del retrato románt