La Revolución Francesa fue el acontecimiento histórico más importante del siglo XVIII, que cambió radicalmente el destino de Francia y de Europa. Fue un proceso complejo y violento, que duró desde 1789 hasta 1799, y que tuvo como protagonistas a millones de personas que lucharon por la libertad, la igualdad y la fraternidad. Sin embargo, la Revolución Francesa también estuvo rodeada de misterios, enigmas y curiosidades que aún hoy siguen despertando el interés y la fascinación de muchos. Toma de la Bastilla durante la Revolución Francesa La sublevación de la Vendée La Vendée fue una región del oeste de Francia que se rebeló contra la revolución en 1793, y que protagonizó una de las guerras civiles más sangrientas y olvidadas de la historia. Los habitantes de la Vendée (o Vandea) eran mayoritariamente campesinos, católicos y monárquicos, que se sentían marginados y oprimidos por el nuevo régimen republicano, que les imponía impuestos, levas y persecuciones religiosas. Por eso, decidie
Velázquez fue uno de los primeros exponentes en España del nuevo tipo de composición de los bodegones, escenas de cocina o de taberna con figuras y objetos de naturaleza muerta. Aunque la representación de bodegones era una tradición temática muy arraigada entre los artistas del momento, esta era considerada como un arte menor y sólo recibiendo su reconocimiento con las obras de Velázquez. La mulata Un arte menor La representación de bodegones tiene su origen a finales del siglo XVI. La composición del bodegón, normalmente, tenía una técnica estructurada, es decir, sobre una mesa se organizaban los objetos propios de una cocina. Sin embargo, en los elementos de estos bodegones había variaciones: los bodegones y naturalezas muertas flamencas destacan por la exuberancia de sus productos, es un culto a la comida. En estos bodegones aparecen representadas piezas de caza y la mesa llena de frutas y manjares, exponente claro de una sociedad enriquecida por el importa