Los mapas, tal y como los conocemos hoy, no existieron en la antigüedad. No tenían sentido y no servían para nada porque no eran reales y ni siquiera señalaban el tiempo que se tardaba en llegar de un lugar a otro. El origen de la palabra "Europa" proviene de un personaje de la mitología griega, pero como denominación de un territorio, la península más occidental del continente Euroasiático, no se afianzaría hasta el siglo XVI. Europa Regina de Putsch Los mapas del mundo antiguo y el medievo En el mundo antiguo no había mapas porque la concepción que tenían del espacio estaba basada en la ruta que seguían para sus distintos menesteres, como los comerciales, por ejemplo. Lo que consultaban para ello eran las guías, o documentados libros de viajes (periplos), si los había, En ellos se recogen nombres de pueblos, ciudades, aspectos topográficos de los lugares, accidentes geográficos de la ruta, etc. La representación de algunas de estas guías, en definitiva, señalan estos "
El término “arte contemporáneo”, que sirve para designar al realizado durante el s.XX, se caracteriza por el constante cuestionamiento de los convencionalismos. La transgresión será la seña de identidad de unos artistas que se harán eco de la situación de inestabilidad social, política y económica por la que atraviesa la Europa de la época. Dalí El rupturismo de los “ismos” Genéricamente se reconoce como “arte contemporáneo” aquel que se llevó a cabo durante el siglo XX y que cuestionaba los principios artísticos de las últimas décadas del XIX (Impresionismo y Postimpresionismo), aunque fueron estos, precisamente, las raíces de su formación y de su espíritu crítico. Serán sin embargo los cambios políticos, sociales, económicos, científicos y filosóficos de finales del siglo XIX y principios del XX los que influyan de forma decisiva y hagan concebir a estas nuevas generaciones de artistas una manera diferente de afrontar la realidad y su revolución estética