Los huevos de Fabergé son unos objetos decorativos en forma de huevo, elaborados con metales y piedras preciosas, que fueron creados por el joyero Peter Carl Fabergé y sus artesanos para los zares de Rusia y otros clientes distinguidos entre 1885 y 1917. Estos huevos se consideran obras maestras de la orfebrería, por su belleza, su complejidad y su originalidad. Además, son testimonios de una época histórica marcada por el esplendor y el ocaso de la dinastía Romanov, la última familia imperial rusa. El origen de los huevos de Fabergé La tradición de regalar huevos decorados en Pascua es muy antigua y tiene un significado simbólico de vida, renacimiento y esperanza. En la Iglesia ortodoxa rusa, la Pascua es la fiesta más importante del año y se celebra con tres besos y el intercambio de huevos pintados o esmaltados. La idea de crear huevos de Pascua con materiales preciosos se le ocurrió al zar Alejandro III, quien en 1885 encargó al joyero Peter Carl Fabergé un huevo especial para su
Este fraile franciscano fue cardenal , arzobispo de Toledo , primado de España , tercer inquisidor general y regente en dos ocasiones de la Corona de Castilla. Además de asceta, reformador y político, Cisneros fue un generoso mecenas de instituciones y obras culturales y científicas, cumpliendo el ideal del hombre renacentista. Biblia Políglota Complutense Faceta religiosa Gonzalo Jiménez de Cisneros, más tarde conocido como Francisco, nació en 1436 en la localidad madrileña de Torrelaguna en el seno de una familia de hidalgos pobres. Como muchos jóvenes de su condición y clase, inició carrera eclesiástica cursando estudios en Roa, para después trasladarse a Alcalá de Henares. Posteriormente se trasladó a Salamanca para estudiar Teología y Derecho. Su faceta de estudiante concluiría en Roma, donde fue además nombrado sacerdote. Isabel "la Católica": su vida familiar Tras el fallecimiento de su padre, Cisneros r