Miguel Ángel Buonarroti (1475-1564) es considerado uno de los mayores artistas de la historia, por sus obras maestras en escultura, pintura, arquitectura y poesía. Sin embargo, pocos saben que en sus inicios también se dedicó a la falsificación de arte, con el fin de demostrar su talento, ganar dinero o burlarse de los expertos. Miguel Ángel Buonarroti "Eros durmiente" y dibujos ahumados Según los biógrafos de Miguel Ángel Buonarroti, este realizó algunas obras que hizo pasar por antiguas como la escultura de "Eros durmiente" que vendió al cardenal Raffaele Riario. Sin embargo, el engaño no duró mucho. El cardenal pronto se enteró de que la estatua era una falsificación moderna, y quiso devolverla al vendedor. Pero para entonces, Miguel Ángel ya se había hecho famoso por su “Piedad”, que se exhibía en la Basílica de San Pedro. No obstante, el cardenal, lejos de enfadarse se convirtió en el primer patrocinador de Miguel Ángel y le encargó otras dos obras: un &quo
Gobernó con el nombre de Maatkara Hatshepsut,y fue la mujer que más tiempo estuvo en el trono de las "Dos Tierras". Hatshepsut no sólo pretendió ser "faraón", sino que se proponía inaugurar una auténtica dinastía femenina de reyes. Reina consorte y regente Hatshepsut probablemente nació en Tebas, por entonces capital del estado, pero no se sabe exactamente la fecha. Su padre fue el faraón Tutmosis I que no era, como sucedería a lo largo de toda esta dinastía, hijo legítimo de Amenhotep I, a quién sucedió, sino hijo de una esposa secundaria. Por ello, para legitimar su poder tuvo que casarse con la princesa Ahmose, esta si, hija legítima del faraón. La pareja real, Tutmosis I y Ahmose, tuvo al menos cuatro o cinco hijos, pero sólo uno, debido a la gran tasa de mortalidad infantil, llegaría a la edad adulta, Hatshepsut. Nuevamente, pues, una mujer sería la heredera legítima, pero, y aunque su padre intentó que le sucediera, una conju