Los huevos de Fabergé son unos objetos decorativos en forma de huevo, elaborados con metales y piedras preciosas, que fueron creados por el joyero Peter Carl Fabergé y sus artesanos para los zares de Rusia y otros clientes distinguidos entre 1885 y 1917. Estos huevos se consideran obras maestras de la orfebrería, por su belleza, su complejidad y su originalidad. Además, son testimonios de una época histórica marcada por el esplendor y el ocaso de la dinastía Romanov, la última familia imperial rusa. El origen de los huevos de Fabergé La tradición de regalar huevos decorados en Pascua es muy antigua y tiene un significado simbólico de vida, renacimiento y esperanza. En la Iglesia ortodoxa rusa, la Pascua es la fiesta más importante del año y se celebra con tres besos y el intercambio de huevos pintados o esmaltados. La idea de crear huevos de Pascua con materiales preciosos se le ocurrió al zar Alejandro III, quien en 1885 encargó al joyero Peter Carl Fabergé un huevo especial para su
El motor de agua español fue un invento que pretendía hacer funcionar un vehículo con agua en lugar de gasolina. Su creador fue Arturo Estévez Varela, un ingeniero industrial nacido en Badajoz en 1914. Estévez Varela afirmaba haber descubierto un método para producir hidrógeno a partir del agua mediante un reactivo secreto y usarlo como combustible para el motor. Arturo Estévez Varela ¿Cómo funcionaba? Según explicaba Estévez Varela, el motor de agua español era en realidad un generador de hidrógeno a partir del agua. El hidrógeno es un gas inflamable que se puede usar como combustible para motores de combustión interna o para pilas de combustible. El problema es que el hidrógeno no se encuentra libre en la naturaleza, sino que forma parte del agua (H2O) y de otros compuestos. Para obtener hidrógeno del agua se necesita aplicar una corriente eléctrica al agua mediante dos electrodos, lo que provoca la separación de los átomos de hidrógeno y oxígeno. Este proceso se llama electrólisi